lunes, 26 de marzo de 2018

Tal vez solos


















Foto: desde Pinterest

martes, 20 de marzo de 2018

El puente








Un cuento donde haya un puente tan largo que me lleve a otra era. Más adelante en el tiempo, si el tiempo fuera una línea sin inicio ni fin.

Que esté formado de burbujas sucesivas que no se rompen al pisarlas, donde pueda rebotar en favor de un traslado amable. Que floten en un aire espeso y viscoso, oscuro.

Un cuento donde las luces no encandilen, tampoco las personas. Donde las redes de energía sean sensibles y no confundan. Donde las emociones no tengan nombre.
Donde el lenguaje sea música y los tonos su espectro. Donde la intensidad se perciba en colores. Y no haya palabras. 

Un cuento con un puente que desde el futuro no se vea el pasado. Donde se olvide sin trauma.

Foto: Takashi Kitajima  

domingo, 18 de marzo de 2018

El abrazo















La síntesis del encuentro.

Foto: desde Pinterest

lunes, 12 de marzo de 2018

Aquí











Aguas bien claras
colores y el oleaje,
llámalo vida.

Imagen: desde Pinterest

viernes, 9 de marzo de 2018

Sentido








El insondable imperio del sentido. 

Aquí, lo estricto ¿se apega a la ley o es aún factible de interpretación? La duda frente a lo puramente estricto desagrega capas a la posibilidad de otros sentidos y sin embargo, lo obvio las promueve. 

¿Es lo dicho lo anhelado por decir?.

Foto: desde Pinterest

martes, 6 de marzo de 2018

Uno














Festejan solos
sus andanzas los héroes,
y no son santos.

Foto: desde Pinterest

viernes, 2 de marzo de 2018

Imperios














El vasto imperio de lo REAL.
¿Cuántas realidades nos atraviesan? 
¿O ninguna?

Foto: Francesca Woodman

jueves, 1 de marzo de 2018

Mientras tanto, el Azar jugaba conmigo

Pasados los diez días de iniciado el juego y después de las diez publicaciones, se me ocurrió cerrarlo de la misma forma que transcurrió. Pregunté al I Ching, libro de la milenaria sabiduría china, qué mensaje enviaba para los días que duró el juego y lo abrí al azar. Aquí la respuesta: 

I Ching - Richard Wilhelm

Pág. 181

25. Wu Wang / La inocencia (Lo inesperado)

En lo alto está Ch'ien, el Cielo, abajo se halla Chen, el movimiento. el trigrama inferior, Chen, se define por el trazo fuerte que ha recibido desde arriba, desde el Cielo. Si, conforme a ello, el movimiento responde a la ley del Cielo, el hombre es inocente y sin falsía. He ahí lo genuino, lo natural, que ninguna clase de reflexiones o de segundas intenciones ha enturbiado. Allí donde se nota la intención, se pierde la verdad y la inocencia de la naturaleza. Naturaleza sin la directiva del espíritu no es verdadera naturaleza, sino naturaleza degenerada. Partiendo de la idea de lo natural, la formación de ideas prosigue todavía parcialmente, y así el hexagrama llega a marcar también la idea de lo no intencionado, lo inesperado.

EL DICTAMEN

La inocencia. Elevado éxito.
Es propicia la perseverancia.
Si alguien no es recto tendrá desdicha,
y no será propicio emprender algo.

El hombre ha recibido desde el Cielo su naturaleza originalmente buena, inocente, con el designio de que ésta lo guíe en todos sus movimientos. Al entregarse a esta índole divina que tiene dentro de sí, alcanza el hombre una límpida inocencia, la cual, sin segundas intenciones en cuanto a recompensas y ventajas, hace sencillamente y con instintiva certeza lo que es recto. Esta certeza instintiva obra elevado éxito, y es propicia mediante la perseverancia. Pero no todo es naturaleza instintiva en ese elevado sentido de la palabra, sino que lo es tan sólo lo recto, aquello que concuerda con la voluntad del Cielo. Sin observar lo recto en este sentido, un modo de obrar instintivo e irreflexivo, tan sólo acarreará desgracia. El Maestro Kung dijo al respecto: "El que se aparta de la inocencia, ¿a dónde irá a llegar? La voluntad y la bendición del Cielo no acompañan sus acciones".

LA IMAGEN

Bajo el cielo va el trueno:
Todas las cosas alcanzan el estado natural de la inocencia.
Así, ricos en virtud y en correspondencia con el tiempo,
cultivaban y alimentaban los antiguos reyes a todos los seres.

Cuando el trueno -la energía vital- vuelve a agitarse bajo el cielo durante la primavera, todo brota y crece y todas las criaturas reciben de la naturaleza creadora la inocencia infantil de la esencia primigenia. Así obran también los buenos gobernantes de los hombres: con la riqueza interior de su ser cuidan ellos de todo lo que vive, y de toda cultura, y realizan a su debido tiempo todo lo que es necesario para su cultivo.